La monoimpresión es transferir una imagen única de un soporte en este caso gelatina a otro, bien sea papel, madera, tela, lienzo...
Una de las razones del porque me fascina esta técnica, es que cuando me inicié en el grabado, mis primeras impresiones calcográficas estaban vinculadas a la naturaleza...
Cuando descubrí esta técnica hace años empecé a investigar con ella y a experimentar.
Y me fascinó pues podía imprimir por capas, superponer una detrás de la otra y lograr efectos realmente mágicos.
La habilidad y la destreza que se logra con esta técnica es realmente asombrosa.
Los elementos naturales los podemos transferir de una manera muy sencilla logrando resultados de gran riqueza visual.
La plancha de gelatina al ser de una textura tan suave y delicada, deja esas imágenes vaporosas muy atractivas.
Disfrutar de esta técnica es un ejercicio maravilloso de creatividad.
Comparto algunas de mis imágenes preferidas...
la imagen de una semilla encontrada mientras caminaba...
No hay muchos secretos con esta técnica, pero si tenemos que aprender ciertos pasos para observar siempre lo que hay detrás, para enriquecer lo que se encuentra a la vista...
"El lado más fino de la creatividad, se llama observar, aprender a ver"
Comments